miércoles, 23 de febrero de 2011

África

Dejamos
de
mirarnos
el ombligo
y
vimos
que
había dolor
más allá de nuestras fronteras.

6 comentarios:

  1. Fascinante lanza que atraviesa nuestra crisis europea.


    Todo un continente de injusticia, nuestro señorío de Amos blancos ha causado ese dolor y ellos han aprendido a dominar causándolo. Pero sanarán por que hemos vuelto sólo como sirvientes Padres blancos.Un abrazo.

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  2. Aumentó nuestro temor
    y elevamos nuestros muros
    queríamos prorrogar
    nuestra modorra indolente.

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  3. Y vimos que los misioneros cristianos eran los que más paliaban ese dolor y esa necesidad, ¿verdad?
    Un saludo.
    ;O)

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  4. Y no cristianos también. No es necesario destruir culturas ancestrales por el mero afán de extender un mensaje. Es necesaria la ayuda venga de donde venga, pero sin vanagloriarse de profesar una determinada religión.

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  5. Los misioneros cristianos jamás han destruido nada, porque es intrínseco al mensaje cristiano ser constructores y no destructores. Que otros apropiándose del nombre cristiano, y por motivos políticos o crematísticos hayan hecho eso, hay que aprender a discernirlo adecuadamente. Los cristianos no tenemos afán de extender un mensaje. ¡Hemos encontrado el sentido del vivir! y deseamos compartirlo con quien quiera escucharnos. Nada más. Vanagloria es hallar complacencia en la autoalabanza, y reconocer una buena labor es un acto de justicia.
    Hay que profundizar un poco más y no contentarse con juicios superficiales.
    Un saludo.
    ;O)

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  6. Desde el asentamiento de colonias europeas en África y posteriormente descubrimiento de América, la religión cristiana ha estado siempre unida al proceso de conquista, tratando de unificar en un solo credo a los pueblos sometidos. Así se destruyeron cientos de creencias ancestrales, especialmente animistas, con lo que los pueblos perdieron una parte fundamental de su identidad. Aquellos que no se convertían al cristianismo eran asesinados y así desaparecieron pueblos como los aztecas o los indios norteamericanos, que no quisieron perder sus principios pese a la amenaza del hombre europeo.

    Esto mismo ocurrió en África hasta no hace demasiado tiempo, pues en Guinea Ecuatorial (por poner un ejemplo cercano a nuestro país) se persiguieron creencias ancestrales durante la dictadura franquista. Sin embargo, muchos de estos cultos siguieron vigentes en la intimidad de los hogares, viéndose impregnados los cultos cristianos de tradiciones "paganas".

    No niego en la actualidad una buena intencionalidad en la misiones cristianas, pero siempre y cuando respeten los cultos tradicionales de aquellos lugares donde van, pues no sólo son religiones tan legítimas como el cristianismo, sino incluso más antiguas.

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